Cangzhou, la cuna del Wushu

La ciudad de Cangzhou está situada sobre la orilla del Gran Canal, a 250 kilómetros de Beijing. Allí el wushu (artes marciales) está muy desarrollado. Según cálculos realizados en el pasado, en Cangzhou y otros 14 distritos cercanos, hay 500.000 personas que practican el wushu repartidas en unos 6000 centros de capacitación y casas de boxeo.

HISTORIA

Las artes marciales de Cangzhou tienen una historia tan milenaria que hace más de 1.700 años se popularizaron ampliamente. Debido a que era un lugar estratégico, cerca del mar Bohai en el este, de la montaña Taihan en el oeste y en el norte, de Beijing y Tianjín, se lo disputaban en el pasado militares beligerantes.

Disturbios bélicos ininterrumpidos, opresiones y explotaciones por parte de los funcionarios y caciques locales obligaron a los lugareños a practicar el wushu para defenderse. Además, Cangzhou era un lugar de exilio, y muchos exiliados eran grandes conocedores de las artes marciales. Por ejemplo, Lin Chong, prototipo de uno de los protagonistas de la famosa novela clásica A la orilla del agua, era jefe de instrucción de la guardia del palacio imperial, formada por 800.000 soldados durante la dinastía Song (960-1280).

Fue castigado y exiliado a Cangzhou, donde enseñó habilidades marciales entre la población. Estas circunstancias dieron a Cangzhou fama nacional por la práctica del wushu.

DISTINTOS TIPOS

El wushu de Cangzhou es de muchos tipos, como boxeo, juego de armas y otros ejercicios donde las habilidades de fines ofensivos son sus características comunes. Existen numerosos relatos al respecto. 

En el reinado del emperador Qian Long (1736-1796) de la dinastía Qing, Sun Tong, proveniente de Tai'an, provincia de Shandong, que tenía el sobrenombre de "piernas de hierro" fue al nordeste a ganarse la vida. Un día llegó cerca de Cangzhou y vio un grupo de hombres con sables obstruyendo el camino y saqueando a los viandantes, al observar esto se colerizó y les fue inmovilizando uno tras otro golpeándoles en puntos vitales. Aquellos sujetos reconocieron su falta golpeando la frente en el suelo (forma de respeto) ante Sun Tong, y le retuvieron amablemente con el deseo de que Sun les enseñara sus habilidades. Al enterarse de que se dedicaban al saqueo como única solución para sobrevivir aceptó la petición.

Durante el reinado del emperador Jia Qing (1796-1821), Yin Yuwen acomodada en el sur de la ciudad de Cangzhou, admiraba mucho a los caballeros errantes. Un día le visitó un monje que dominaba el gongliquan, un tipo de wushu que se caracteriza por su poder curativo, de autodefensa y de fortalecimiento físico. Yin lo aprendió y difundió rápidamente en la localidad.

Así se han ido formando gradualmente diversas clases de wushu en Cangzhou. En los inicios del presente siglo se estableció allí la escuela provincial de wushu con seis estilos de boxeo. Después de más de medio siglo de desarrollo, se ha transformado, hasta 1984, en 15 escuelas con 27 estilos de boxeo.

TALENTOS

En épocas pasadas surgieron innumerables talentos de wushu en Cangzhou. En el reinado del emperador Qian Long, Wu Zhoung, de la nacionalidad hui, después de dominar bajiquan llegó a Cangzhou para medir sus habilidades marciales con el abad, aunque sobresalía por su técnica de Shaolinquan, fue derrotado por Wu y quedó admirado por su destreza, regalándole un saco de dardos, luego, Wu fue a Yanjing (Beijing de hoy) y compitió en el palacio imperial con un príncipe de alto nivel militar. Para evitar sufrir heridas quitaron las puntas de las lanzas. Después de tres asaltos Wu le ganó, sin embargo el príncipe no lo consintió, lucharon nuevamente y volvió a ser derrotado. Entonces tomo a Wu como su maestro.

A principios del presente siglo, Zhang Zhankui, famoso maestro de xinyiquan derrotó en Tianjin a un boxeador alemán condecorado con medallas de varios países. En 1918 Wan Ziping, que tenía una fuerza prodigiosa, derrotó en Beijing a un boxeador ruso llamado vulgarmente el hombre más fuerte del mundo. Más tarde, en Shanghai y en otras grandes ciudades venció a boxeadores de Estados Unidos, Japón y Alemania. Después de la fundación de la nueva China Wan Ziping tomo el cargo de la vicepresidencia de la Asociación de Wushu de China y en 1964 siguiendo el primer ministro Zhou Enlai visitó varios países.

TRADICIÓN

Muchos talentos de wushu tales como Wan Ziping provenían de la calle Yihe, al sudeste de Cangzhou. Actualmente hay allí centros de capacitación y casas de boxeo, donde se practican las artes marciales por la mañana y por la noche. Los mejores deportistas son enviados a participar en competiciones primaverales de wushu celebradas anualmente por la región de Cangzhou.

En el pasado para tener un experto en artes marciales por maestro, el padre del futuro discípulo debía primeramente escribir una tarjeta de presentación, luego acompañar a su hijo a la casa del experto, una vez allí, el hijo tenía que postrarse ante él sosteniendo la tarjeta con las manos levantadas, después el experto le explicaba las reglas debía obedecer y por último el padre le ofrecía un banquete al experto. Solo cumplido todo esto el experto pasaba a ser maestro de su hijo.

Ahora no es necesario cumplir estos ritos, pero deben realizarse ciertos tramites. Los que vienen de otras partes de China para ingresar a estudiar wushu tienen que presentar una carta de recomendación y los lugareños necesitan a un pariente como intermediario. Todos deben respetar a su maestro y se les prohíbe terminantemente utilizar el wushu como arma de ataque, exigiéndoles completa integridad moral. Atraídos por la fama de Cangzhou muchos aficionados acuden desde los rincones más remotos de China para aprender wushu.*

(*) Tomado de: Shihua, A. (1-4). Cangzhou, la cuna del WUSHU. Chi Kung Kung Fu, 18-21.